Alguien me cuestionó sobre
cómo era posible que yo viera este tipo de películas, y la respuesta es simple:
yo soy cinéfila en el amplio sentido de la palabra, así como un día me desgarro
los sesos deshilvanando lo que quiso expresar un director de su obra, otro día
simplemente y por puro entretenimiento me gusta ver efectos especiales,
colisiones espectaculares de automotores, aviones, y demás.
Empecemos por la
calificación que le otorgo de 1 a 10. Mi calificación es 9. Y puede que tal vez
sea un poco generosa –tal vez sólo se merece un 8-, pero ya les daré a
continuación las razones por las cuales he decidido colocarle esta calificación.
Mis razones comienzan aquí:
- Es
una saga que ha sabido reinventarse a sí misma a pesar de que parezca que
hay un momento donde no hay más tela de donde cortar.
- Los
personajes principales no pierden su esencia.
- El
elemento central de la serie no se desgasta en el tiempo: la adrenalina.
- El
parque automotor sigue siendo el personaje número uno, incluso aparte de
los seres humanos.
- La
saga se ha hecho de tal forma que las partes de las que está compuesta
hacen un engranaje perfecto. Es decir, no hay hilos sueltos en la
elaboración del guion.
- La
musicalización, banda sonora o soundtrack siempre ha encajado con lo que
se quiere expresar.
Ahora,
mi única razón para no darle un 10, es el hecho de que el guion de esta sexta
versión, se siente fragmentado y no tan fluido, como en las anteriores. La
falta de una cohesión clara entre varias escenas impide que el filme se sienta
como un todo y más como pedazos inconexos – en algunos casos-. Y el hecho de que
se le señale de tener algo de “falta de inteligencia”, pues hay que resaltar
que ante todo este es un grupo de personajes que se distinguen por sus
habilidades automotrices, y no por ser grandes agentes de espionaje y contra
espionaje. Después de que quede claro este delineamiento en los personajes, se
sabe a qué atenerse. A entretenimiento puro. Simplemente eso.
Además
de la sabia dirección de Justin Lin –nada mejor que un taiwanés para hacer
colisiones de carros y demás-, quien nos ofrece su cuarta entrega, -en sus
manos estuvieron las versiones 3, 4, 5 y 6-, tanto la musicalización, excelente
edición, efectos especiales –abunda el CGI por todas partes-, y elevadas cuotas
de humor confieren al filme una sensación de entretenimiento en su alto nivel.
Y pues si es cierto que hay muchas “carretillas”, -coloquialismo utilizado en
el caribe colombiano para señalar lo que en condiciones reales desafían completamente
las leyes de la física-. Y aquí hay que agradecerle a la evolución rápida del
CGI, con el que cada vez más se va puliendo la posibilidad del acercamiento a
un mejoramiento de la calidad de escenas de alto nivel de riesgo.
Han
pasado 12 años desde la primera versión de Rápido
y Furioso donde la subcultura de las carreras de carros callejeras marcó un
hito importante en el género de acción en el cine. Y conforme ha pasado el
tiempo, la franquicia se ha tornado mucho más ambiciosa, por ejemplo, en esta
sexta versión la inclusión de aviones y carros tanques militares, además de los
usuales carros y motos, le añade cierto plus a la serie. No obstante, también le
resta un poco a lo que vimos inicialmente en la 1y en la 2. En esas dos la
pasión por el equipamiento, arreglo, mecánica y conocimiento de la mecánica interior
de los autos era lo más importante. En las últimas versiones se le ha dado
mayor énfasis a las explosiones y colisiones. Entre más exageradas y ostentosas
sean, el espectador quedará más estupefacto y maravillado por la obra. Pero
básicamente, como lo dije anteriormente, la evolución de las imágenes generadas
por computador, la pantalla verde y los dobles de riesgo, han dado pie para que
la espectacularidad de las escenas prime sobre la construcción de un buen
guion.
En
esta versión nos encontramos con la sorpresa de tener entre el elenco de
actores a Gina Carano, la cara oficial de las artes marxiales mixtas en los
Estados Unidos, a quien ya habíamos visto en el thriller Haywire, que no tuvo una amplia recepción del público, pero que fue
un importante salto para ella que le significó el entrar al club Soderbergh. De
actuación, poco, pero es un excelente refuerzo físico femenino para Dwayne
Johnson, “La Roca”. Además de ella, los personajes usuales, como Dominic
Toretto, que por momentos toma una cerveza que no es su favorita, la mexicana Corona. Lo vemos en las Islas Canarias
con una cerveza Dorada. Otro product placement lo podemos apreciar en
una despensa de Coca Cola dietética en lo que parece ser un garaje subterráneo
en Londres.
Ya
que tocamos el tema de las locaciones, esta vez se reemplaza la ciudad de Rio de
Janeiro por Londres y España. A mi parecer la quinta versión estuvo mejor
referenciada debido a que podíamos apreciar mejor el lugar, y habían fuertes referentes
iconográficos que nos permitían saber que ciertamente se encontraban en el
lugar que mencionaban. Pero esta vez, si no es por un bus de doble piso que
pasa por ahí , cierto puente, y uno que otro personaje con acento inglés, no se sienten como si
de veras estuvieran localizados en el país.
Muy
novelesco me pareció aquello de la amnesia de Letty Rodriguez, que si bien es
el motor principal para que Dominic acepte entrar en la captura de estos
mercenarios, por ciertos momentos se siente como un recurso nada innovador para
traer de la muerte a un personaje que creíamos ido. No obstante, se siente un
poco más completo el grupo. –No ofense to
Elsa Pataky-.
El
tema de la familia ha sido la columna vertebral de la historia a través de los
12 años de la saga, así mismo, otra de las razones del éxito de la misma se
deriva de la química colectiva de sus personajes y de la interrelación entre
todos.
Ahora,
la pregunta más importante que tendrán los espectadores al final del visionado
es dónde va Tokyo Drift, ya que cronológicamente
no estaría de tercera en la franquicia. Sino, que la localizaríamos después de
la sexta. Eso es todo lo que puedo decir en aras de obviar spoilers en el final
de la entrega. Espero que ustedes, así mismo, saquen sus propias conclusiones.
Bonus:
El carro utilizado por Dominic Toretto en esta entrega es un Jensen
Interceptor, carro Inglés.
Escena para no perderse:
TODAS!!!
Mi recomendación:
No tomar grandes cantidades de líquido antes o durante la función.